viernes, 10 de febrero de 2012

Medio Maratón Fuencarral-El Pardo... ¿porqué?



El domingo me enfrento por primera vez al Medio Maratón Fuencarral-El Pardo. Había leido opiniones entusiastas sobre esta carrera y me apetecía probarla.

Si mis cuentas y registros no me engañan, será mi 9º medio maratón. Debería estar acostumbrado. Tiene un perfil durillo y no forma parte de los "objetivos" del curso, por lo que no tengo prefijado un objetivo de tiempo. Puedo afrontarla con tranquilidad, como si fuera un entrenamiento (un "rodaje largo").

Entonces... porqué siento este cosquilleo; esta leve inquietud; esta sombra de duda...

¿Hará mucho frío? Manga larga sí, pero ¿mallas largas o cortas?
¿Será más duro de lo que pienso (la segunda mitad, casi todo cuesta arriba)?
Voy solo ¿no echaré de menos la compañía de trotones?
No me siento fuerte ni rápido... ¿para qué me inscribo en un medio?
¿Para qué (porqué) corro?

Al final siempre llego a la misma pregunta... Sin respuesta satisfactoria... Porque sí. Quizás por ese cosquilleo, por esa leve inquietud, por esa sombra de duda, por esas preguntas sin respuesta...

4 comentarios:

  1. Al final todas las carreras, aunque no tengamos un objetivo o sean solo de entrenamiento, producen cosquilleo, nervios y dudas. El efecto dorsal y la prueba de lo que nos gusta correr. A mí también me pasa.
    Mucha suerte mañana!

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    1. Gracias por lo ánimos, Pingüina. Esta mañana me llegaros seguro!

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  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  3. Bueno qué, ¿ha sido dura?, seguro que has salido airoso como siempre.
    Esperaré la crónica que aunque últimamente no participo mucho en el blog (ni en las carreras), leo todas tus entradas.
    Aprovecho para mandar un saludo a todos los trotones.

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