Domingo 19 de octubre, 9 de la mañana, hoy no siento ese hormigueo que he tenido anteriormente en cada carrera, no me preocupa porque se exactamente la causa, hace dos días ha venido al mundo mi hija Sofía y eso me mantiene en una nube, no teniendo en mente otra cosa que no sea ella.
Hoy corre con nosotros mi vecino Carlos. Trotón Javi no ha podido venir. Azahara se ha apuntado de voluntaria para ayudar a la Organización con unos amigos. La dan 20 euros y una bolsa con camisetas y demás regalitos habituales en la pruebas. ¡Su primer sueldo !.
Calentamos unos minutos, el pavimento está mojado porque ha llovido por la noche, esperemos no tener resbalones. Nos colocamos no muy lejos de la salida, hay mucha gente pero no lo agobios de la carrera perfecta.
Salimos, a los 200 metros Carlos se va, esta un par de niveles por encima, yo quiero seguir el ritmo de Alberto durante toda la carrera, sabedor de que se quiere desquitar del mal sabor de boca de la carrera perfecta, va a por un buen tiempo. Si mantengo el ritmo de trotón Al, alcanzo el doble objetivo de no desgastarme mucho al principio y mantener un ritmo vivo al final que permita hacer un buen crono (no tengo muchas esperanzas, he dormido muy poco en los últimos días y estoy muy cansado, la tensión de estos días con el parto de Sofía pesa en las piernas).
Los tres primeros km vamos bien, no recuerdo exactamente en estos momentos de escribir, pero en torno a los 15 minutos. Llegamos juntos al km 6 y vamos por debajo de 32 minutos, creo recordar que mejorando el tiempo de la Carrera Perfecta.
Empiezo a perder a trotón Al en torno al km 7, aunque mantengo la distancia en un centenar de metros. A la entrada de Alberto Alcocer pierdo de vista a trotón Al.
Intento mantener un buen ritmo en los últimos kilómetros, tengo unas ganas locas de terminar para volver al hospital y ver a mi chiquitina. Una pareja me confunde, hablan entre ellos dándose ánimos en el último kilómetro, cuando realmente aún estábamos en el 8 y pico. El sobreesfuerzo me parte un poco el ritmo, pues cuando pensaba que quedaban unos 500 metros, me encuentro con una pequeña subida y el indicador de kilómetro 9. Trato de recuperarme en los primeros 500 metros del último kilómetro, para echar el resto en los 500 finales.
Entro en la meta, como siempre, esquivando a los torpes que se paran unos metros antes de llegar o nada más atravesar la línea, por mi crono 53'58", ¡alucino!, mejoro casi 1 minuto mi mejor marca, ¡ y en estas condiciones!. En broma había comentado que iba a bajar de 54' pero ni mis mejores expectativas se acercaban a ese tiempo. Finalmente el cronometraje oficial me da 54'00", lástima, otra vez me quedo a las puertas de bajar un guarismo los minutos (ya me pasó con el 55').
Busco a Azahara para despedirme, esta muy liada recogiendo los chips. Fue una bonita carrera en un momento muy especial de mi vida, creo que la recordaré siempre con especial cariño.
Trotón Teo.
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