Bueno pues hecha la crónica de Al, procedo a contar mis propias experiencias.
En primer lugar, y antes de entrar en harina, quería darle mi mas sincera enhorabuena a Al, que ha conseguido muchas cosas. En primer lugar, transmitir y compartir toda la ilusión y preparación de un proyecto y un sueño. En segundo lugar ¡Ser oficialmente Maratoniano! Y por último ¡Ser Sub-4 horas!. Si señor.
Por supuesto también quiero acordarme de todos/as los que habéis estado allí con nosotros. Unos en presencia, otros en espíritu pero allí después de todo.
Comenzaré por el principio, por como me he sentido este fin de semana. La verdad es que estaba un poco preocupado, ya que aunque mis marcas son muy discretas, si que me gusta terminar las carreras y ciertamente en este caso tenia miedos y creo que fundados.
Este año he participado en diez miles y en medias, con lo que kilómetros acumulados si que tengo. Lo que echaba en falta era un entrenamiento más específico, mejor planificado y más regular. Es cierto que he diversificado la actividad deportiva, y sin ser especifico para correr, creo que la que más me ha ayudado para cubrir distancias largas ha sido el alpinismo invernal. Es un deporte muy exigente en las aproximaciones, ya que te obliga a mantener una frecuencia cardiaca elevada unas cinco horas, con un desgaste muscular importante en las piernas.
Con ese bagaje me presenté a las 8.15 de la mañana el día de autos. Encuentro con Al y su familia y fotos de rigor, para minutos después introducirnos en la “masa”. La aglomeración era importante, pero en esta ocasión no nos importaba una salida lenta, de hecho entraba en nuestros planes. Patrulla Águila sobrevolando los cielos, paracaidistas aterrizando en la cabecera de la carrera, en lo que parecía ser una fiesta donde Madrid se engalana para su cita mas internacional y vistosa en el mundo de las populares. Comentamos impresiones, estrategias, alguna conclusión de las que saqué en el maratón de 2008 y ¡pum!...salida lanzada. Tan lanzada que pasamos por el arco cinco minutos después.
Afrontamos con ritmo lento y suave la subida la Castellana disfrutando de Madrid. Tenía clara la estrategia y sabía que debía ser tacaño con el ritmo, aunque me preocupaba la idea de estar retrasar a Al ya que iba mucho mas fino que yo. A la altura de Pio XII nos separamos (kilómetro 8 aprox.) y me centro en mi música, en el ambiente y en Madrid.
Tengo claras una serie de cosas.
1.- Por lo que he leído, “el muro”, sobreviene hacia las tres horas debido a que se agota el glucógeno en sangre obteniendo energía entonces de las grasas. Esta transición es la que te hunde, ya que la obtención de energía por este método es mucho más ineficiente. Además dicha transición metabólica provoca una interrupción del suministro energético, lo que para un corredor popular puede ser el fin. A mayor ritmo de carrera, antes acabamos con el combustible primario, asíque tranquilos. Además llevaba cuatro ampollas de glucosa, que fui tomando cada 10 kilómetros y lo cierto es que me sentaron bastante bien.
2.- El sol es mi enemigo, asíque “huyo” literalmente de el. Busco todas las sombras durante el recorrido.
3.- Tengo que evitar un posible golpe de calor asíque nada. A beber en todos los avituallamientos. Un vaso de isotónica y una botella de agua, de la que la mitad me la hecho por encima. La organización impecable. Agua cada 2,5 kms mas o menos, patinadores con vaselina, réflex, duchas del ejercito para bajar la temperatura. En ningún momento te vas a sentir solo.
4.- Los malos pensamientos desterrados. A observar el entorno, escuchar música, y buscar a los tuyos. Muchísimas gracias a todos los presentes allí porque nos habéis hecho mucho mas llevadero el tormento este.
Siguiendo con la experiencia en carrera, me sitúo en la media maratón y reviso mi estado. 2:02 (creo) No es un buen tiempo pero no me preocupa, ya que esa no es mi meta. Por lo demás, el cardio sin problemas y muscularmente todo esta correcto. Me siento como al inicio de una carrera. Lo que mas me preocupa son las articulaciones, que de momento no me molestan. Ahí creo que las plantillas Sorbothane han hecho muy bien su función. En la media de Madrid me las machaque…Creo que mis Kayano piden irse a Senegal, donde alguien quizá con menos peso que el mío le pueda sacar provecho a unas zapatillas estupendas, que parecen estar en buen estado, pero que al menos para mí y mi manera de correr ya no amortiguan lo suficiente.
En este punto comienzo el trabajo psicológico y me planteo un 11.000, hasta el 32, y a ver que tal me encuentro. La casa de campo mentalmente hablando es dura. Pasas de bajar a llanear o incluso subir, y de un entorno urbano a silvestre. En definitiva se hace largo. Pero esta vez menos que en 2008. Todo va bien (eso sí, a la salida espera una subida capaz de saltar los fusibles a cualquiera).
Solo me falta un 10.000. Borrón y cuenta nueva en mi cabeza, fijándome el objetivo de llegar al 37, donde la cosa se pondrá fea con la subida. Músculos bien, cabeza bien, pulmones bien y cubro la distancia.
En este punto tengo claro que voy a acabar. Mi cuerpo esta relativamente bien, con lo cual lo voy a acabar con la cabeza. Pienso en toda la gente que ha venido, en que se merecen vernos entrar después de tantas horas y que si me retiro a falta de cinco les traiciono. Asíque hacia delante sin fisuras.
Subo sin pararme, lo cual es una mejora respecto al 2008, llega el 42 y con el la entrada triunfal al Retiro. Indescriptible. Veo caras conocidas lo cual me permite acelerar. Levanto los brazos y para mi sorpresa he conseguido mejorar la marca de 2008 (4:19:00) bajándola a 4:15:59. No es gran cosa, pero supuse que mi forma actual era peor que antes. ¡Parece ser que la compañía trotona me está dando alas!
Me siento eufórico y pletórico por haber terminado, con un sabor de boca especial por haber participado en una carrera mágica, donde te enfrentas a ti mismo, a distancias que en tu mente parecen imposibles, y donde al menos durante cuatro horas haces una introspección brutal. Tu y tus pensamientos, tu y tus miedos, tu y tu cuerpo.
Por fin, veo a Al y a nuestra gente y lo celebramos con ellos. Nos damos un abrazo (un poco rígido eso sí, ya que parecemos tablones del Ikea) y confirmo lo que ya sospechaba. Al es un flamante Sub-4 horas habiendo hecho una segunda media bestial.
Yo por lo demás, saco la misma conclusión que en 2008. Tiempos como los de Al aparte, TERMINAR, es algo factible. Con entrenamiento, estrategia, cabeza (mucha) y capacidad de hacer esfuerzos no muy intensos pero de larga duración, se puede terminar.
Y siendo consecuente con las conclusiones, y porque creo que todo corredor debería vivir esta experiencia lanzo el guante. Sería genial que en 2012 el mayor número de trotones posibles nos diéramos cita en el paseo de recoletos en el XXXV MAPOMA. ¡¡Yo me apunto!!!
¡¡Un abrazo amigos!!
Enhorabuena, Miguel! Hiciste una fenomenal carrera. Con tranquilidad y sabiendo aguantar, se puede hacer. Aunque recuerdo que ayer decías al terminar que no te dejabas liar más... Está claro que el maratón te hace adicto desde el primer acercamiento.
ResponderEliminarENHORABUENA Trotón Miguel, eres un auténtico crack... ¿qué ser humano de los corrientes consigue terminar UN MARATON con el entrenamiento que has podido hacer este año?... Desde luego San Judas Tadeo (y María Auxiliadora), junto con las plantillas y demás gadgets han hecho su papel de "soporte" para ayudarte, pero el mérito final es TUYO.
ResponderEliminarLo dicho, felicidades (también de una tal María, a la que al parecer conoces de algo), y que al año que viene otra vez... pero con algo más de entrenamiento.
Trotón Carlos, deberías saber que un Maratón (en la mayoría de los casos), es lo que diferencia a los hombres de los niños...
ResponderEliminar¡HE AQUÍ DOS TITANES!
Felicidades Miguel! Si los compañeros trotones os hubieran visto a tí y a trotón Al, al finalizar la proeza, tan tranquilos y compuestos, multiplicarían los elogios.
ResponderEliminarBravo por vosotros!
Un abrazo.
¡¡Hey Teo!!
ResponderEliminarHombre entero, entero...de una pieza si que estaba. Pero literal, que parecía una garrota. Me alegró verte.
Muchas gracias a todos.
Por cierto Al, tienes razón. Ayer lo veía todo un poco mas negro, pero bueno. Estas cosas es lo que tienen, que pronto olvidas lo malo y te quedas con lo bueno, asique si Dios quiere y como dice Carlos con mas entrenamiento el año que viene, lo volveré a intentar.
¡Cómo esta el blog!¡arde con los heroes! ENHORABUENA MIGUEL, veo que ya tienes superado el dolor y ha podido la alegria. Me alegro. No esperaba ese tiempo de ti con lo que habias entrenado este año, es casi una heroicidad. A mi me ha pasado como a Carlos, por un momento me lo planteé para el 2112, pero también se me ha pasado enseguida.
ResponderEliminarDisfruta de tu exito.
ENHORABUENA, máquina!!!
ResponderEliminarMuchas gracias a todos de verdad. Maratones aparte, he de reconocer que gracias al Blog, vuestros artículos y compañía, he vuelto a recuperar poco a poco las ganas de correr y de participar en carreras populares, que lo cierto es que lo tenía un poco abandonado.
ResponderEliminarPara mí eso es lo positivo y en parte os lo debo.
Por cierto Carlos, recuerdos para la reportera María y dale las gracias tambien.
¡Un abrazo!
FELICIDADES MIGUEL!He leído la crónica unas cuantas veces...me parece increíble...
ResponderEliminarUn fuerte abrazo