lunes, 23 de noviembre de 2009

¡ Yo también quiero contar lo mío !

Esperaba esta prueba de fuego. Después de la decepcionante participación en la carrera del CSIC, necesitaba medir mi recuperación. Bien es cierto que en la del CSIC ocurrió todo lo contrario a lo de esta carrera, sobraron varios centenares de metros. Esta circunstancia, la larga convalecencia y la disminución de la cantidad y calidad de entrenamientos hicieron caer como una losa las aspiraciones a obtener marcas similares a las de la temporada pasada. Me sentí decepcionado, no creía que la brecha de tiempos iba a ser tan grande.

Comenzamos a buen ritmo, (relativo a Al y a mi, Trotón Carlos ya nos dejó abandonaditos en los primeros quince metros), en torno a los 5,20. Conseguí mantener ese ritmo o incluso mejorarlo durante los 5 primeros kilómetros, todos ellos junto a Trotón Al. A partir de ese punto más o menos, comienzo a descolgarme de Trotón Al, afrontando en solitario la mitad restante.

Curiosidad; en los previos a la carrera comento a María las casualidades de coincidir en varias competiciones con algunos corredores entre tantos miles de personas. Y ciertamente se repite la situación, vuelvo a coincidir con un participante entradito en años y kilos, con un correr muy particular y no puedo entender como a esas alturas de carrera va a mi lado, se mantiene e incluso llego a verle por delante en alguna ocasión, me parece imposible.

Voy animado, pero empieza a rondarme por la cabeza los tres últimos kilómetros de subida que me faltan. Ya sabéis lo mal que lo paso en las cuestas, dejo todo mi rédito ganado con esfuerzo en esos kilómetros finales. Trato de utilizar el arma secreta que por primera vez he usado en una carrera, un mp4 con canciones marchosas de la Orquesta Mondragón (en cinta me da buen resultado, me marca un ritmo aceptable), pero no siento que la cuesta se haga más llevadera.

En el kilómetro 8 compruebo con gran alegría que puedo llegar en el minuto 54, lo que supondría estar en los tiempos de la temporada pasada. Sin darme cuenta y sin el sufrimiento que esperaba, me veo entrando en el Retiro, aunque echo en falta la revuelta que me había comentado Trotón Al. Enfrento el sprint y vislumbro el sorprendente crono de 51' 50", no me lo creo, me pongo eufórico y paro mi reloj en 52'00" (en ese momento aún no he asimilado que no es posible haber realizado el último kilómetro en 3' y que algo debe estar mal).

Se confirma que faltaban 300 metros, un error de los motoristas de cabeza, no obstante estoy contento, la marca conseguida en los 9.700 mts supone estar más o menos en los ritmos de año pasado. Ahora toca mejorar para intentar acercarme al nivel de Trotón Al, al menos en las diferencias que teníamos el año pasado.

Un abrazo.

1 comentario:

  1. Ya echaba yo de menos la versión de trotón Teo (el escritor nocturno, a juzgar por las horas a las que publica sus anotaciones). En las últimas carrera se limitaba a escribir algo así como "yo también corrí".

    Enhorabuena, que ya estás en los tiempos del año pasado a pesar de las diferentes incidencias que has sufrido. Ahora, a entrenar con más constancia, que aún tienes pendiente los 50'.

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