Mi primer medio maratón de la temporada, el de Granada

Con un día de retraso, os relato mi segunda participación en el Medio Maratón de Granada.

Este año la carrera se ha celebrado en noviembre (el año pasado fue en diciembre), por lo que la he afrontado con un mes menos de entrenamientos. Sin embargo, tenía un aliciente adicional a los habituales: ha sido el primer medio que he corrido junto a mi amigo Migue.

Antes de la carrera, el amigo Migue y Trotón Al

El previo a la carrera, sin novedades dignas de mención. Llegamos con algo menos de tiempo del habitual, pero suficiente para una visita al aseo y calentar un poco. Migue saluda a unos cuantos conocidos suyos con los que comparte carreras por Granada. Yo, finalmente, no he podido coincidir con Belli (pero ya habrá otras oportunidades).

Salida con mayor aglomeración que el año pasado: cosa de las obras y de que había unos 300 ó 400 corredores más que el año pasado (cerca de 2.000). Entre la experiencia que había tenido Migue en el medio de Motril y que yo llegaba corto de entrenamiento, los dos nos lo tomamos con calma para disfrutar de la carrera. Pasamos por el km.5 en 27'30".

Migue va a buen ritmo, pero no se siente del todo bien. Aunque yo voy muy cómodo y creo que podría ir un poco más rápido, no tengo prisa: me he propuesto ir tranquilo hasta el km.10.

En el avituallamiento del km.9 me separo unos metros de Migue y, aunque voy ralentizando, veo que no me alcanza, de forma que al pasar por el control del km.10 (Camino de las Vacas: 55' casi justos, es decir, el segundo 5km en 27'30" de nuevo) me despido de él y empiezo a ir un poco más rápido.

Empieza la subida y empiezo a adelantar corredores. En el paso por La Chana tengo a parte de la familia animándome (¡gracias!), lo que siempre inyecta un punto más de velocidad. En los siguientes kilómetros, subiendo hacia la Avda. Puliana, continúo adelantando participantes con bastante facilidad. Eso también anima.

Km.15 en Ancha de Capuchinos por debajo de 1h22'. La subida ya ha pasado y yo sigo con más fuerzas que el año pasado. No es de extrañar, ya que he ido más tranquilo toda la primera mitad. El tercer 5km lo he hecho en menos de 27' a pesar de ser la parte más dura. Y ahora quedo lo más bonito: pasar junto al Hospital Real, Jardines del Triunfo y Arco de Elvira para desembocar en Gran Vía (¡qué pena que sólo hayan cerrado al tráfico una vía! en la otra tenemos que aguantar una larga fila de automóviles y sus respectivos conductores que no se muestran muy partidarios de los corredores...). ¡Impresionante correr por Reyes Católicos, Plaza del Carmen, Navas, Pza. Mariana Pineda, Carrera del Genil, Paseo del Salón...

Mientras corro por el centro de la ciudad, empiezo a hacer cálculos del tiempo que podría hacer. Ahora sí me marco un objetivo: bajar de 1h52' (no vaya a ser que los trotones más exigentes me echen la bronca después). El km.19 lo paso unos segundos por debajo del 1h42', por lo que sé que tendré que forzar un poco el ritmo. Así lo hago (y continúo adelantando corredores). No miro el paso por el km.20 (después calculo que fue 1h47'30" para hacer un cuarto 5km en 25'30"). Último esfuerzo y logro entrar por debajo de 1h52' (1h51'55", tiempo neto). Unos 6' después entra Migue, que, aunque no haya estado cerca de sus mejores tiempo, sí que ha logrado olvidarse de las malas sensaciones del medio de Motril.

Últimos metros antes de entrar en el polideportivo: se nota el cansancio (y las obras)

Últimos metros de Migue: más feliz que una lombriz

Tras la carrera, también noto más aglomeración que el año pasado en la recogida de la bolsa y la bebida.

Reposición de líquidos y estiramiento mientras busco a Migue y a reportera Maripepa (autora de las fotos que ilustran esta crónica, ¡gracias!). Me extraña que Migue no coja comida ni bebida y descubro la razón un rato después cuando nos despedimos con una cañita (tamaño tercio) con "tapita" (pedazo de bocata) junto al polideportivo. Buena forma también de agradecerle a reportera Maripepa que me haya acompañado una vez más y haya esperado pacientemente a mi llegada.

"Entonces ¿nos tomamos una cervecita para recuperarnos?"

Podemos resumir este primer medio de la temporada calificando mi participación como correcta (dentro de los objetivos), aunque no brillante. Habrá que seguir entrenando. Lo mejor de todo ha sido poder compartir carrera (y cerveza post-carrera) con Migue.

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