Los días previos
Los entrenamientos de la semana previa fueron, como habitualmente, cortos y suaves: el domingo previo cerca de 10km en unos 55min y el martes 8km en 45min. En mi opinión, durante la semana previa al maratón hay que "acumular ganas de correr".
Salida a Roma con la familia el jueves. Hay que aprovechar para hacer algo de turismo y esa es nuestra actividad principal los dos días siguientes. A pesar de tomárnoslo con tranquilidad, terminé un poco cansado de caminar de allá para acá. A cambio, creo que me (sobre)cargué convenientemente de hidratos de carbono (pasta por la mañana, helado por la tarde, pasta por la noche...).
El viernes por la tarde fue el momento de visitar la feria del corredor. Es la tercera que visito (Madrid, París, Roma) y es la tercera que me decepciona. No me gustan las ferias del corredor. Muchos stands de marcas comerciales que no ofrecen nada diferente a lo que puedes encontrar en cualquier tienda. Los precios son los mismos (cuando no más altos). Eso sí, hay mucha más gente. Lo único que siempre me parece curioso y, a veces, hasta interesante, es la publicidad de las carreras (en la feria del maratón de Madrid conocí los 100km Madrid-Segovia y gracias a eso -y a la experiencia de la Pingüina Veloz- al año siguiente los hice). En fin, recogida de dorsal rápida y sin colas (eso fue lo mejor).